En Kimetsu no Yaiba, el destino de Tanjiro y Nezuko Kamado da un giro crucial gracias a Giyu Tomioka, el Pilar del Agua, quien decidió protegerlos pese a las estrictas normas del Cuerpo de Exterminio de Demonios. Pero, ¿alguna vez os habéis preguntado qué habría pasado si otro Pilar hubiera estado en su lugar? ¿Habría sido su historia igual de esperanzadora o habría terminado en tragedia?
A continuación, exploramos algunos escenarios alternativos que podrían haberlo cambiado todo.
¿Qué habría sido de ellos si hubieran sido encontrados por…?
Shinobu Kocho, Pilar del Insecto

Shinobu, con su voz dulce y su sonrisa constante, esconde un profundo resentimiento hacia los demonios. Aunque su enfoque es pragmático y científico, su odio podría haber sido un obstáculo importante para Tanjiro y Nezuko.
Inicialmente, Shinobu probablemente habría mostrado curiosidad hacia Nezuko como un fenómeno único: un demonio que no ataca a humanos. Sin embargo, esa curiosidad podría haberla llevado a buscar estudiarla en lugar de protegerla.
Su enfoque más calculador y menos emocional podría haber generado tensión con Tanjiro. En un escenario positivo, Shinobu podría haber usado su ingenio para demostrar la validez de la inocencia de Nezuko al resto del Cuerpo, así como su valor científico. Pero, en el peor de los casos, podría haber intentado envenenarla "por el bien común", como parte de sus experimentos.
En esta perspectiva, la relación entre Tanjiro y Shinobu habría sido mucho más conflictiva, y el destino de Nezuko podría haber estado en peligro desde el principio.
Kyojuro Rengoku, Pilar de la Llama

Con su energía y carácter apasionado, Rengoku podría haber sido una figura paternal para Tanjiro y Nezuko desde el inicio. Su lema de proteger a los inocentes y su fuerte sentido del deber lo convierten en un Pilar que probablemente habría defendido a los hermanos Kamado.
Rengoku podría haber visto en Tanjiro y Nezuko un caso digno de excepciones. Su disposición para protegerlos habría sido evidente, aunque podría haber enfrentado dificultades para convencer a los superiores del Cuerpo.
También es probable que Rengoku hubiera asumido el papel de mentor, ayudando a Tanjiro a mejorar sus habilidades como espadachín y ofreciendo apoyo emocional.
De esta forma, la trama podría haber tomado un rumbo más enfocado en los ideales de justicia y compasión de Rengoku, con un desarrollo más rápido de Tanjiro como cazador.
Mitsuri Kanroji, Pilar del Amor

Con su corazón compasivo y su habilidad para empatizar, Mitsuri habría sido una aliada natural para Tanjiro y Nezuko.
Ella probablemente habría sentido ternura hacia Nezuko y admiración por la determinación de Tanjiro para protegerla. Su instinto habría sido protegerlos desde el principio. Y pese a que habría sido una defensora fuerte, su carácter menos asertivo podría haber dificultado su capacidad para influir en las decisiones de los superiores.
Con Mitsuri, la historia podría haberse centrado más en la importancia de la empatía y las emociones, aunque con mayores retos para obtener el apoyo del Cuerpo.
Muichiro Tokito, Pilar de la Niebla

La indiferencia inicial de Muichiro hacia los demás podría haber hecho de este encuentro algo muy impredecible. En su estado más distante, Muichiro probablemente habría ignorado a Tanjiro y Nezuko o los habría considerado irrelevantes. Entonces, quizás el acercamiento inicial podría haber sido iniciado por ellos mismos.
A medida que Muichiro recordara su propio pasado trágico, podría haber comenzado a empatizar con la lucha de Tanjiro por proteger a su única familia. Su apoyo más significativo podría haber llegado más tarde, con un mayor enfoque en el impacto emocional profundo, reforzando los temas de memoria y redención.
Sanemi Shinazugawa, Pilar del Viento

Sanemi, siendo conocido por su profundo odio hacia los demonios, habría representado uno de los mayores retos para Tanjiro y Nezuko. Su agresividad y desconfianza podrían haber convertido el encuentro en un enfrentamiento mortal.
Él probablemente habría intentado matar a Nezuko en el acto, sin dar espacio a explicaciones, lo que habría obligado a Tanjiro a enfrentarlo para proteger a su hermana.
En caso de que Nezuko hubiera logrado demostrar su autocontrol, Sanemi podría haber reconsiderado su postura, aunque esto habría tomado tiempo y una gran dosis de evidencia. Quizás ese autocontrol se habría manifestado al proteger a Tanjiro, lo que habría sembrado la duda en Sanemi.
En este caso, su relación con Tanjiro habría sido tensa y violenta, con un enfoque más oscuro y lleno de conflictos internos dentro del Cuerpo. Además, podría haber dado lugar a un mayor enfoque en Nezuko y su propio desarrollo, probando su inocencia y demostrando su valía más allá de su condición de demonio.
Hay cientos de situaciones y “universos” posibles
Cada Pilar tiene una personalidad única que habría dado un giro diferente a la historia de Tanjiro y Nezuko. Desde la dulzura pragmática de Shinobu hasta la pasional justicia de Rengoku o la agresividad de Sanemi, estas alternativas destacan la riqueza del mundo de Kimetsu no Yaiba.
¿Vosotros estáis de acuerdo con estas interpretaciones?
La elección de los Pilares ha sido un poco personal y un poco aleatoria, así que, ¿creéis que otro Pilar habría cambiado la historia de forma más interesante?
En mi caso, pienso que el cambio más interesante de ver sería con el Pilar del Viento, Sanemi Shinazugawa, por eso os he presentado este hasta el final. ¿Y para vosotros? ¡Me encantaría conocer vuestra opinión y teorías!
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